Modelo extractivo canadiense afecta a comunidades indígenas y campesinas en México

Por Pablo Gómez Barrios
RCInet.ca

Una delegación de activistas mexicanos se encuentra actualmente de gira en Canadá, para denunciar ante el gobierno y la opinión pública canadiense el asesinato del ambientalista Mariano Abarca Roblero en Chicomosuelo, Chiapas.

Los activistas que forman parte de esta gira denuncian también el papel que jugó la embajada de Canadá en México con respecto a la industria minera canadiense en ese país.

Organizaciones civiles de México y Canadá que apoyan la denuncia de la delegación mexicana, obtuvieron documentos bajo la ley de la transparencia en Canadá, que demuestran que a pesar del conocimiento que tenía la embajada del conflicto entre Abarca y la minera canadiense Blackfire, en Chiapas y de las amenazas de muerte que estaba enfrentando, prefirió acudir al gobierno estatal de Chiapas para solicitarle que controlara las protestas contra la minera en la comunidad.

Este caso pone nuevamente sobre el tapete la triste situación que viven las comunidades en donde las compañías mineras se han implantado. En Canadá, la delegación mexicana ha participado en eventos públicos en Ottawa, Montreal y Toronto para explicar la situación que están viviendo.

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